Para ahorrar con el uso de la lavadora:
- Ponerla sólo cuando esté totalmente llena.
- Si no hay suficiente ropa para poner una lavadora entera, utilizar los programas de media carga.
- Separar la ropa de color de la blanca (las condiciones de lavado son diferentes)
- Separar la ropa según el grado de suciedad y el tipo de tejido.
- Entre el 80 y el 85% de energía que consume la lavadora se utiliza para calentar el agua. Así que hay que utilizar programas de baja temperatura siempre que la ropa no esté muy sucia (hasta 30º).
- Si se echa más jabón del indicado, la espuma puede estropear la lavadora. Es adecuado alternar el uso de detergente líquido y en polvo para cuidar la ropa.
- El centrifugado gasta menos energía que la secadora.
- Si tenemos tarifa nocturna procuraremos encender la lavadora por la noche.
- Las lavadoras con sistema de carga inteligente detectan ellas mismas el peso y son capaces de alargar o acortar el programa según el peso que se les introduzca.
Hay que tener en cuenta que la lavadora es el tercer electrodoméstico que más consume después del frigorífico y del televisor.
Para ahorrar con el lavavajillas:
- Utilizarlo sólo cuando esté del todo lleno.
- Usarlo en modo ahorro 50ºC, 55ºC, o programas automáticos en lugar de programas de alta temperatura. Se pueden ahorrar así hasta 20.000 litros al año.
- Los lavavajillas utilizan menos agua y energía que el lavado a mano. Se puede ahorrar hasta 30 litros al día.
- Con el lavavajillas se obtiene mayor limpieza y más higiene que con el lavado a mano.
- Hay que cargar la vajilla como se indica para que circule bien el agua.
- No es necesario enjuagar los platos a mano.
- Se deben revisar y limpiar los desgües y filtros periódicamente.
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